Con mucho corazón

febrero 14, 2020
Tenía este proyecto pendiente de enseñar y con su temática la tentación era muy grande como para resistirme, así que  aquí estoy poniendo (aún más) corazones a este día y de paso dándole un pizco de mimo a mi blog que lo he tenido bastante abandonado. I love youuuuuu!!! XD

Lo que me está pasando últimamente es que empiezo proyectos, me pongo a tejerlos como si no hubiera un mañana y cuando me queda tan sólo esconder cabos para terminarlos... ¡empiezo nuevo proyecto! Y los casi terminados se quedan en el fondo de mi armario "indefinidamente".

Cuando entró en el armario era un simple cuello. Cuando salió lo hizo con esta mona tan sonriente. ¡Saluda, Juana!
Así que una vez rescatado ha sido cuestión de tenerlo listo en diez minutos para estrenar. ¡Dácil, recuérdalo, para cuando pienses escaquearte en tu próximo proyecto!

Creo que es el patrón con el que más me he divertido tejiendo hasta la fecha. Me resultó sencillo, pero al mismo tiempo muy entretenido con ese calado y viendo cómo iban apareciendo los corazones conforme iba avanzando.

En un momentín lo tenía hecho. Además con él me estrené leyendo gráficos, y debo decir que una vez aprendí... ¡¡¡boooo a las instrucciones escritas!!! XD


El resultado no me tiene muy entusiasmada (culpa mía, que se veía clarísimamente cómo iba a quedar una vez terminado), y siendo sincera, si no fuera porque el hilo es súper delicado y lo estropearía tiraría de la hebra y haría su versión larga, para poder darle varias vueltas y que quedara pegado al cuello.

Y es que a efectos prácticos no le veo utilidad. Porque un cuello que no me lo cubre, sino que queda por ahí colgando a su aire, pues yo eso así apenas lo uso. Que habrá gente que le encante llevarlo a modo de complemento, porque la verdad es que queda bonito, pero yo busco que abrigue.

Esto me tiene que servir de experiencia, que me entra todo por los ojos pero no me paro a pensar qué es a lo que realmente le voy a dar uso. ¡Aprendida la lección! (O no...)


Lo hice un pelín más alto (media repetición más que la indicada en el patrón) con la idea de que lucieran aún más los corazones y me tapara más cuello. Ejem y requeteejem. Léanse los párrafos anteriores.

De cualquier forma intentaré usarlo, aunque sea como "collar gigante", hasta que se me ocurra cómo hacerlo más llevable. ¿Tal vez un steek? Como Juana me oiga lo desaparece y adiós cuello, jajaja.

De cualquier forma Juana, mi Cuello Corazón y yo les deseamos... ¡Feliz San Valentín todo el año! Que el cariño no se ratea y se da siempre, ¿verdad? :P

4 valientes

  1. Pues el cuello es muy bonito, pero como dices, para uso diario quizás no tan práctico... y fíjate, que mientras que estuve leyendo, estuve pensando que quizás hay que probar el Steek para hacerlo más útil -)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias, Wendy! ¡Entonces estamos de acuerdo! Yo había pensado hacer el steek y luego tal vez ponerle unos botones para abrir y cerrarlo. Pero primero intentaré ser menos radical fruit y probaré a recogerlo con un broche a ver si así queda más práctico 😝😝😝.

      Eliminar
  2. Llego tarde para felicitarte san Valentín, pero no para hacerlo por tu gran trabajo. Yo también prefiero leer gráficos (y colorearlos, para qué nos vamos a engañar) para trabajar con calados: mucho más fácil y rápido. Eso sí, confieso que no acabo de ver los corazones sino picas invertidas (lo siento...) Una pena que no puedas usar el cuello como tenías pensado porque te ha quedado precioso y no merece quedarse olvidado en el armario. ;-)
    Besotes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias, Alhana! ¿Picas invertidas? ¡Noooo! ¡Si se ve clarísimamente que son corazones! No sufras por él (o por mí), porque me compré varios broches para chales y resulta que uno le va perfecto a este cuello. Ahora me lo estoy poniendo bastante, así que nada de “quedarse olvidado en el armario “. Pero no creo que vuelva a tejer uno de este estilo, la verdad🙊🙊🙊. Un besoteeee.

      Eliminar

¿Habemus comentarios? Que sí, que sí, que sí, que se merecen una olaaaaaaaaa, porque me encanta leerlos, y me hacen muchísima ilusión. Pero los comentarios para autopromocionarse, y los manifiestamente ofensivos... esos se autodestruirán en ¡tres, dos, unoooo! ¡Boom!